Acerca de mí
Encontrando inspiración en cada paso
Como terapeuta holística y conferencista durante los últimos 32 años, me encanta trabajar con todo tipo de cristales: piedras preciosas, pulidas, como quieras llamarlas.
Primero me certifiqué como masajista terapéutico junto con las titulaciones en anatomía y fisiología en 1992. A estas les siguieron poco después las de especialista en belleza y terapia holística un año más tarde.
Empecé a trabajar y a atender a diversos clientes para adaptarme a mi joven familia. Sin embargo, cuando mi matrimonio se rompió y tuve que trabajar para mantenerme a mí mismo y a mi familia, empecé a trabajar en Champneys, una gran cadena de spas. Tenían horarios de trabajo diurnos, y me fue de maravilla.
Podía dejar a mis hijos en el colegio, ir a pasar unas horas con un masaje, o con reflexología, aromaterapia, etc., mientras mi ex los recogía. No importaba si después estaba destrozada.
Después de Champneys, decidí convertirme en autónomo y continué trabajando dos días a tiempo parcial allí y a tiempo parcial alquilando salas de terapia en Londres, donde trabajaba otros tres días a la semana.
En esa época, también decidí contribuir y me fui a la universidad para aprender a ser profesora de adultos. Tenía que dar clases en una universidad un día a la semana, así que dejé mi trabajo en Champneys; de lo contrario, no habría tenido tiempo para la familia. Pero todavía mantengo contacto ocasional con algunos miembros del personal.
He impartido clases en varios centros, como en centros de formación profesional y en el London College of Beauty Therapy. Sin embargo, nunca olvidaré a mis queridas alumnas de la promoción de 2010 en el Stanmore College.
Cuando se trata de todo tipo de cristales, piedras pulidas y gemas, la gente siempre me pregunta si realmente funcionan. He visto cosas maravillosas como terapeuta holística y practicante de Reiki. Pero necesitas creer en ti mismo.
Se puede decir que son de una belleza cautivadora y desprenden auras de lo más espléndidas. Creas o no en sus poderes curativos, tienes que admirar sus impresionantes manifestaciones, disfrutar de lo que aportan a tu vida y partir de ahí.
